Gente que habla sola (II)

Parece mentira que ese artilugio creado por Billy Puertas (Bill Gates para los amigos) nos tenga ahora tan esclavizaditos. Pero sobre todo, desde el boom de Internet, que oficialmente se produjo en 1995 con la llegada del Windows 95, lo estamos aún más. Si antes de Internet éramos solitarios "a secas", ahora bien se puede decir que somos "solitarios en compañía" (nada que ver con una hipotética Lonely Hearts Band Club). Pero hasta el menos fanático puede justificar su cyber-adicción diciéndose que "en realidad, no hablo solo: hablo con mi ordenador". Y eso precisamente son los blogs: soliloquios de aquellos que no tenemos tribuna subvencionada, con la esperanza (cierta, desde luego) de que alguien recoja nuestro mensaje en una botella. Por eso estamos aquí. Porque lo que decimos difícilmente sería publicado en un periódico. Mediante el blog nos aislamos del ruido mediático y, más de una vez, escuchamos a nuestro corazón.