viernes, abril 07, 2006

CRISTINA


24/11/2005 - CRISTINA
---------------------------------------
(postedao originalmente en Yaycos; hoy lo vuelvo a traer a la luz, porque esta noche llega mi amiga Cris de Madrid, y por supuesto, viene acompañada)


Marcharse a Madrid fue lo mejor que le pudo pasar en todos los sentidos. Nos conocemos desde hace muchos años y desde siempre se declaró homófoba, además se jactaba de sentir un odio tremendo hacia cualquier homosexualidad, le daba lo mismo entre hombres o mujeres. Ella simplemente decía que no lo soportaba, abiertamente, sin pudor, a pesar de nuestras caras, la gente que la conocía de toda la vida y a pesar de las caras de la gente que se sentía aludida o que no la conocía tanto como nosotras.

Hace ya un año a Cris le ofrecieron un puesto de Consultora Senior en una muy buena empresa de Madrid y allá que se fue mi amiga con sus maletas, su espléndida sonrisa, sus ganas de comerse el mundo, su seguridad en todo lo que creía y lo que era y por supuesto también se llevó su homofobia.

Sería muy largo relatar todo tal y como lo fuimos viviendo nosotras aquí y ella allí, cuantos mails y cuantas llamadas que se cruzaban entre Asturias y Madrid... A los quince días de llegar encontró un piso compartido con otras tres chicas en el barrio de Salamanca, casi nada...

Y como nos dijo ella :
“Pues la primera en la frente, resulta que dos de mis compañeras de piso son bolleras”


Nos pareció algo genial porque pensamos que de una vez por todas se daría la oportunidad de conocer y dejarse conocer, pero lo pasó realmente mal, apenas pasaba tiempo en casa, se duchaba la primera porque no soportaba hacerlo después de ellas, lavaba los cubiertos y los platos antes de cada comida aunque ya estuvieran lavados... y mil idioteces más. Sara llegó a sugerir que lo tratara en un psicólogo, pero ella dijo que no tenía ningún problema, que “el asco no se curaba”. Intentó cambiar de piso, pero no encontraba nada mejor de lo que tenía y se consolaba pensando que apenas estaba en casa, tan solo para dormir; la vida la hacía fuera. A los dos meses, Cristina pasó un fín de semana en Asturias y nos contó lo bien que se llevaba con la gente del trabajo, en especial con una chica de su equipo, Julia, que era con la que salía de copas, de compras, hacían vida de pareja según ella porque pasaba muchas noches en su casa por no quedarse en la suya. La decepción para Cris fue descubrir que su amiga también era homosexual. Se enfadó muchísimo incluso lloró, se aisló... Nosotras desde Asturias poco podíamos hacer y nos parecía que lo de Cris se estaba convirtiendo en un serio problema, que iba más allá de lo que nosotras podíamos llegar a comprender (¿admitir?); no entendíamos ese odio, ese “asco” como decía ella, su comportamiento..."

Hoy por hoy lo entendemos. Cris nos llamó ayer por la noche. Dijo que vendría a Asturias en el Puente de la Constitución y que nos traía a alguien muy especial para ella porque quería que la conociéramos. Tardó muchos meses en contárnoslo y cuando lo hizo, fue dando la noticia de que venía. No seré yo la que haga más preguntas, está todo dicho. Tengo una amiga homosexual, quizás después de este puente tenga dos


3 Comments:

Blogger Desahogoo said...

Resulta para mi paradojico que lo que más aborrece uno, termina siendo lo más afin a nosotros, yo siento que es una muestra para mantenernos abiertos y receptivos a la naturaleza que es tan diversa, evolutiva y que puede observarse desde muchos enfoques. Saludos!!!!

6:21 p. m.  
Blogger Mariposa_de_agua said...

Vaya Lena!!
Que te diviertas, con tu amiga, la vida es una cajita de sorpresa, y en ellas vivimos todos, nadie sobra.
Cariños
Pia

11:11 p. m.  
Blogger Rafael said...

Pues a pasarlo bien...si como dice la cancion de de la Orquesta Plateria..."La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ay, Dios.."
Besos, xiquilla¡

8:11 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home